¿Qué carrera hacer? 4 consejos para orientar tu futuro

10/28/2022
qué estudiar después de la EBAU

Desde el Instituto Europeo de Posgrado te damos 4 consejos para orientar tu vida profesional y ayudarte a escoger la carrera universitaria que mejor se ajuste a tu plan de vida.

Los tiempos cambian, para bien y para mal. Antaño, nuestros padres y abuelos tuvieron que tomar difíciles decisiones para llegar hasta donde estamos hoy: desde trabajar siendo muy niños hasta decantarse por una profesión que odiaban solo por dar sustento a su familia. 

Por suerte, hoy ya no es tan habitual tomar ese tipo de decisiones (aunque la situación económica del país es un factor muy decisivo en este sentido). Además, la tecnología ha avanzado tanto que el conocimiento se ha “descentralizado”, lo que ha supuesto una enorme ventaja a la hora de estudiar cualquier tipo de formación universitaria o de posgrado.

Las opciones son infinitas, pero precisamente por esto cada vez es más frecuente encontrarnos con estudiantes que, una vez acaban la formación básica, se plantean esa gran pregunta: ¿y yo qué hago con mi vida?

Esto se llama “paradoja de la elección“, un fenómeno muy estudiado en psicología que precisamente habla sobre nuestra incapacidad como humanos de tomar una decisiones cuando tenemos miles de opciones enfrente de nosotros.

Pero para eso estamos aquí, en IEP queremos ayudarte a decidir qué hacer con tu futuro laboral y profesional. Para ello, te damos a continuación 4 consejos para orientar tu futuro y que sepas qué carrera hacer una vez acabes tu formación básica.

1. No tienes por qué elegir la misma profesión que tus padres

Antaño era muy común que los hijos escogieran seguir el mismo sendero que sus padres en materia profesional. El principal motivo solían ser los contactos: seguir la estela paterna implicaba un futuro laboral asegurado gracias a la influencia que este podía ejercer en su entorno. Otro gran motivo, especialmente si había en juego un negocio familiar, era precisamente continuar con el mismo y que perpetuase en el tiempo como parte del legado. 

Sin embargo, actualmente no tiene por qué ser así. Si bien aspectos como el networking siguen siendo igual de importantes, hoy en día hacer la misma profesión que tu progenitor es una decisión propia que no debería ir influenciada por ningún aspecto más allá de la vocación. La situación social, cultural y económica ha cambiado, al igual que el acceso al conocimiento.

Los padres siempre quieren lo mejor para ti. Esto puede llevar a razonamientos erróneos, como pensar que aquello que les funcionó a ellos debe funcionarte a ti también. Los tiempos cambian y un aspecto clave que ha marcado ese cambio es que nuestros padres estudiaron o desarrollaron una carrera lineal. 

Pero hoy no se da ese caso, los datos actuales estiman que los jóvenes cambian aproximadamente cada tres años de empleo o profesión: bien por falta de proyección profesional, por cuestiones económicas o por un cambio de profesión.

Así que no temas en decirles que prefieres desarrollar otra carrera y hazles ver qué futuro profesional buscas. Si les muestras seguridad, pasión y respeto, te apoyarán incondicionalmente.

2. Hazte estas tres preguntas

Es un clásico, cuando te topas con el momento en el que tienes que escoger ya qué carrera estudiar, te quedas en blanco. Te invade esa sensación conocida de desamparo, incluso rechazo. No sabes qué hacer, crees que no eres bueno en nada o piensas que lo que verdaderamente te gusta no tiene cabida en el mundo laboral.

Calma, para ir desgranando poco a poco esta situación, hazte estas tres preguntas:

no sé qué hacer con mi vida

¿Qué te gusta hacer en tus ratos de ocio?

Esta pregunta es fácil. Quizás te gusten los videojuegos, se te den bien las manualidades, te guste salir con tus amigos, ver muchas series o películas o coleccionar funkos. 

Y eso está genial, porque va a revelar muchas cosas sobre ti. Por ejemplo, si te gustan los videojuegos, quiere decir que eres una persona que toma decisiones rápido, que tiene cierta agilidad mental y cierta cultura tecnológica. Con lo cual, una profesión relacionada con la misma quizás te llame la atención.

Por otro lado, si te gusta salir con tus amigos, puede que seas una persona muy sociable, con lo que trabajos que conlleven un trato de tú a tú pueden ser tus fuertes.

No son definitivos, obviamente, pero ya te van dando pistas sobre cómo eres y en qué profesión encajas mejor.

Sigamos.

¿Qué asignaturas se te dan bien?

Hay quien es bueno en matemáticas, pero las odia a muerte, y hay quién ha suspendido biología todos los trimestres, pero resulta que tiene una amplia colección de revistas del National Geographic.

La clave para responder esta pregunta es: ¿a qué asignatura no te importaba dedicarle tiempo? Te costase más o menos, siempre hemos tenido preferencias sobre unas asignaturas frente a otras, y eso es lo verdaderamente importante. Definir tu futuro en función solo de tus sobresalientes es peligroso, porque hay muchos factores que pueden haber influido en esas notas, no solo tu inteligencia o destreza en ellas.

Busca esas asignaturas que no te daba pereza estudiar y relaciónalas con tus gustos. ¿Cuadra? ¿Resulta que te gusta el dibujo y los videojuegos son tu pasión? Ya vamos enfocando un poco más, pero queda precisarlo mejor.

¿Se puede ganar dinero de lo que te gusta y tus preferencias?

Esta es probablemente la pregunta más importante. 

Para responderla, hay que tener recopilados ya tus gustos y tus asignaturas favoritas y hacer un poquito de labor de investigación.

Por ejemplo: te gustan los videojuegos y las manualidades. Una buena salida puede ser emprender y promocionar tus creaciones sobre los personajes de tus juegos favoritos. Eso sí, deberías estudiar posibles becas o ayudas a emprendedores. 

Otro posible escenario es que te guste salir con los amigos y se te den bien las matemáticas. ¿Por qué no ser profesor o divulgador?

Ante todo, no te presiones. Escoger hacia dónde enfocar tu futuro no es una decisión sencilla.

qué carrera elegir

3. Tómate tu tiempo

Y hazlo de verdad. No tienes por qué sacarte la EBAU y lanzarte de lleno a una carrera profesional al día siguiente si aún no te has decantado del todo por ninguna. 

Uno de los grandes errores de esta generación es que se toman muy precipitadamente decisiones en base solo al posible salario o utilizando las preferencias de nuestros padres y las modas de turno. Pero no, esto no debe hacerse así.

Si te has hecho las tres preguntas anteriores, tómate tu tiempo para investigar, para conocerte bien. Si lo necesitas, no estudies inmediatamente, busca un trabajo que te permita viajar y aprender otras habilidades. Eso te abrirá la mente y te dará muchas ideas sobre a qué puedes dedicarte.

4. Estudia bien tus recursos

¿Cuentas con apoyo económico? ¿Tienes un trabajo y tiempo suficiente para dedicarte a estudiar tu posgrado? ¿Estás dispuesto a hacer ciertos sacrificios de ocio para sacar los estudios adelante? ¿La carrera que buscas está en tu ciudad o es viable hacerlo online? ¿Tienes el equipo necesario o puedes conseguirlo? (pc de sobremesa o portátil, conexión a internet, cobertura, etc.)

Como ves, no son pocas las cuestiones que debes plantearte en este sentido. Por suerte, la disponibilidad de formación online ha disipado muchas barreras en materia de espacio y tiempo, permitiéndote una formación integral sin desplazarte de casa. Analiza con detenimiento tus recursos, porque serán un aliciente decisivo para decantarte por una carrera u otra.

En IEP queremos ponerte las cosas fáciles y podemos ofrecerte los mejores másteres y posgrados para labrarte un futuro profesional prometedor.

Entra ahora en nuestra web del Instituto Europeo de Posgrado y comienza ya a construir tu carrera. Y si lo necesitas, contáctanos para cualquier duda que te surja. ¡Te esperamos!

Noticias relacionadas